Con la Revolución de los Jazmines, la violencia de género dejó de ser un tema tabú en Túnez. Así lo indican los primeros resultados de la Encuesta Nacional sobre Violencia de Género realizada por la Oficina Nacional de la Familia y la Población (ONFP), que muestran una opinión pública cada vez más concienciada y movilizada al respecto. Aun así, son todavía pocas las mujeres que deciden denunciar a sus agresores. Y aquellas que finalmente dan el paso, se encuentran frecuentemente con unos funcionarios de policía escasamente formados y sensibilizados para atender sus necesidades.
Según la citada encuesta, realizada por la ONFP, el 47,6% de las mujeres de entre 18 y 64 años ha declarado haber sufrido alguna forma de violencia durante su vida, pero solo el 17,8% ha puesto una denuncia. Son múltiples las razones que esgrimen las víctimas para no denunciar, y revelan hasta qué punto las mujeres han normalizado esta situación de violencia.
En este contexto, y en el marco de un proyecto que CIDEAL lleva a cabo con la Unión Europea, ponemos en marcha una serie de talleres en distintas regiones del país destinados a dotar a los miembros de las Fuerzas de Seguridad de los conocimientos y herramientas necesarias para atender casos de violencia de género. El primero de estos talleres ha tenido lugar en la región de El Kef, situada 170 Km al norte de la capital tunecina y a 40 km de la frontera con Argelia. La zona de El Kef es una de las regiones más marginalizadas económicamente por el antiguo régimen. Se trata de una zona que se basa en una economía rural, con una fuerte tasa de desempleo, que se sitúa alrededor del 25%. La tasa de desempleo de los hombres es del 12,8%, mientras que la de las mujeres asciende al 24,1%. Sigue leyendo →